miércoles, 30 de noviembre de 2011

Contra las cuerdas

La realidad me está haciendo una buena presa...

Como habréis podido comprobar, llevo un par de semanas sin actualizar el blog. ¿Por qué?, quizá se preguntaran algunos de mis escasos pero fieles lectores. La respuesta es más sencilla de lo que parece: por nada especialmente relevante. No tengo ganas de escribir de wrestling, ni más más, ni más menos. La actualidad de WWE y TNA sigue pareciéndome absolutamente deprimente y va laminando mis esperanzas cada vez más. Pero tampoco quiero convertir esta entrada en mi enésima diatriba contra el wrestling actual, porque el problema es más de fondo.

Es verdad, si el wrestling actual está mal, pues tu afición se resiente y uno empieza a dedicarle más atención a otros de sus muchos intereses. Pero, por otra parte, estoy en un momento apurado de trabajo y, además, estamos en un momento histórico en el que resulta complicado no estar pendiente de la evolución de los acontecimientos políticos, económicos y sociales. Claro, eso ha hecho que deje de lado el blog unos días...

El resultado inmediato de este descuido ha sido un desplome del número de visitas al blog. Es casi una ley científica: la actualización de un blog  y el número de visitas mantienen una relación directa, a más actualización, más visitas y viceversa. Por supuesto, no digo que actualizar a menudo sea la única causa de que un blog sea muy seguido, pero desde luego sí es una condición necesaria. Y lo entiendo, no es ningún misterio el por qué. Yo también sigo muchos blogs y si uno no se actualiza con frecuencia, pues o no entras todos los días, o simplemente te hartas y dejas de seguirlo. Además, cuanto más contenido tenga un blog, más posibilidades tiene de aparecer en vete tú a saber qué extrañas búsquedas en Google, Bing y demás, y por consiguiente de conseguir nuevos seguidores que llegan desde los sitios más insospechados.

Bajo presión hasta el más guapo parece feo. Y por ahi si que no paso...

Esta situación plantea un problema a los bloggers, una presión por publicar a toda costa que a veces entra en conflicto directo con los objetivos primarios por los que uno abre un blog. Por lo menos ese es mi caso. Como ya comentara en la primera entrada llevaba años dudando sobre la pertinencia de empezar un blog, y en concreto un blog sobre wrestling. Pero uno piensa que tiene algo que aportar y tiene ganas de divertirse escribiéndolo, así que finalmente me decidí a cruzar el rubicón.

Sin embargo, por mucho que se empeñen los artistones de cualquier pelaje, uno no crea algo sólo por el placer de crearlo y si le gusta al mundo mejor. Eso es una trola de calibre XXL, y quién os la cuente está mintiendo más aún que el que os diga que la apariencia no importa. Uno crea (en mi caso, escribe) para que le guste a uno mismo, pero también a los demás. Los que escribimos queremos que nos lean, los que hacen cine quieren que sus pelis se vean y los que hacen música que la gente escuche su música y vaya a sus conciertos. Lo contrario es una triste falacia.

Así que si quieres que te lean, que a los demás les guste lo que haces, pues tienes que hacer ciertas cosas. Algunas de esas cosas te gustan, otras te dan igual, otras te gustan menos, y otras directamente van contra tus principios más queridos. Ahora bien, una cosa es que la estética sea importante, y otra muy distinta es que en la vida sólo importe estar guapo. Y del mismo modo, una cosa es que quiera que me lean y otra muy diferente que esté dispuesto a hacer cualquier cosa porque me lean. La pregunta entonces es ¿hasta dónde está uno dispuesto a llegar para que le lean?, ¿dónde está el punto de equilibrio entre hacer lo que te sale del nabo pero que no lo conozca ni cristo y dejar de hacer lo que te apetece para que te den palmaditas en la espalda?, ¿cuál es el punto medio entre la masturbación y la prostitución?

Para llegar a la cima hay que verter sangre, sudor y lágrimas. Pero, ¿y para quedarse a medio camino?

Supongo que no hay una única respuesta a estas preguntas. Supongo que cada uno tendrá la suya, y que responderá fundamentalmente a los objetivos que cada uno se marque con lo que hace. En mi caso lo tengo claro: no voy a hacer nada que haga que deje de divertirme escribiendo. Con este blog no tengo intención de sacar dinero, ni de hacerme famoso, ni de cambiar la historia del wrestling. Simplemente creo que tengo una visión chula y original del wrestling y quería compartirla con los demás, y pasármelo pipa haciéndolo. Si no consigo eso, ¿para qué quiero este blog? Esta es la encrucijada en la que me encuentro.

En fin, esas son las reglas del juego y hay poco que hacer al respecto. Más o menos las conocía antes de ponerme manos a la obra, pero hasta que uno no está metido en harina no es plenamente consciente de lo que implica. Uno puede intuir lo que supone tener un hijo, pero realmente no lo sabe hasta que se convierte en padre. Del mismo modo, no experimentas todos estos problemas hasta que no te conviertes en blogger. Empiezas a escribir tan felíz y las cosas te van saliendo, porque bueno, modestamente uno tiene talento para esto, las cosas como son. Y te ilusionas según el número de visitas va subiendo.

Pero de repente un día te ves pegado a las estadísticas de Blogger, preocupado porque las visitas han bajado. Ay dios, ¿qué hago? Y te pones a leer y a escribir, y vas remontando, y te ilusionas de nuevo. Pero te entra una medio crisis, si a esto se le puede llamar así, como la de estas dos semanas, y poco a poco vas pasando de la preocupación al desinterés, del desinterés al "jo tío, qué coñazo", y de ahí a cogerle hasta un poco de tirria al puñetero blog. Parece como un matrimonio tópico, de esos que pasan del amor idílico a un divorcio violento tras un paso prolongado por la indiferencia. Y por ahí si que no paso. No quiero preguntarme "cómo he llegado a esto" o "en qué momento se torció todo". No lo hago en ningún aspecto de mi vida, menos lo voy a hacer con un blog de wrestling.

No sé si es buen momento para salir del armario, pero de perdidos al río: Brutus es uno de mis ídolos de la infancia. Me la suda lo que penséis. 

Que quede claro, no he hecho mucho que no quisiera hacer por subir el número de lecturas. Simplemente he aumentado el número de entradas más allá de lo que tenía pensado cuando abrí el blog y me he visto obligado a estar más pegado a la actualidad de lo que había previsto. Comentarios breves de noticias y cosas así que de otro modo me hubiera limitado a colocar en un foro o página de Facebook, pero procurando darles, como es lógico, una extensión y profundidad mayores. Ojo, algunas de las mejores entradas de este blog, o al menos algunas de las que más he disfrutado escribiendo, empezaron así. Pero cuando a uno le llega la necesidad de parar, se siente frustrado por no poder hacerlo a riesgo de caer en el olvido.

Por otro lado, tampoco estoy teniendo mucho feedback, a pesar de solicitarlo varias veces. Sé que estáis ahí, pero tampoco me habláis mucho. No sé que pensar al respecto.

Así pues, ¿cuál es el camino a seguir? No lo sé. Es difícil decirlo. El cuerpo me pide cerrar el chiringuito, pero no soy amigo de tomar la salida fácil ni decisiones en caliente. Además, sigo teniendo ganas de escribir de muchas cosas que tengo en la cabeza. Pero sé que en los próximos meses voy a estar muy jodido de tiempo y me va a ser muy complicado mantener el blog activo, por lo menos tanto como para seguir creciendo, o como poco mantener un número decente de visitas. Tal vez tenga que superar mi proverbial timidez y promocionar más cada entrada, aunque sean pocas. Desde luego algo muy gordo tiene que pasar para seguir al día WWE y TNA, porque la verdad es que ambas me han ilusionado en 2011, y ambas me han decepcionado a lo grande.

No pongas esa cara Davey, no todo está perdido.

Por favor, no penséis que me estoy poniendo en plan "oh, digo que me voy para que me digan que no me vaya". No es eso, no soy ningún llorica. Como digo, sé que estas son las reglas del juego, y uno ha de aceptarlas si quiere tener un blog. De momento sólo os comparto mi frustración, pero no tomo ninguna decisión drástica. Mañana mismo voy a colgar una reseña de DVD de un luchador que suele gustar a todo el mundo que ya he terminado de escribir, y pasado ya veremos.

Supongo que es un error decir estas cosas porque es la forma más segura de que la gente deje definitivamente de leerte, pero yo soy así: brutalmente sincero. Prefiero deciros estas cosas a la cara y que sea lo que Flair quiera. Si decidís abandonarme definitivamente sólo me queda daros las gracias por estar ahí, a pesar de todo ha sido un auténtico placer.

¡NOS LEEMOS!  

miércoles, 16 de noviembre de 2011

Una buena noticia

¿A quién esperabais que pusiera?

Se ha anunciado que la empresa Ring Of Honor logró ratings de 1,1 en algunas ciudades americanas con las emisiones de sus últimos programas de televisión. Esto supone uno de los mayores logros de la historia de Ring Of Honor, 1,1 es un gran rating para un programa que no se emite de manera nacional por todo el territorio americano y que encima no lleva tampoco mucho tiempo en antena.
Me congratula saberlo. No he hablado aún de Ring of Honor, pero debería hacerlo. Después de tantos post dedicados a poner a parir a WWE y TNA estaría bien hablar bien de una empresa para variar. Pero por otro lado, estoy un poco aburrido de hablar de la actualidad, y el cuerpo me pide hablar más del pasado, como en mi último post sobre Ric Flair, que hace tiempo que tenía ganas de escribir. No sé. De momento, de verdad que deseo fervientemente que ROH crezca. A ver si así por fin vemos algo de competencia dentro del campo del wrestling. 

domingo, 13 de noviembre de 2011

10 razones...


... Por las cuales Ric Flair es el mejor luchador de todos los tiempos.

1) Es el luchador más versátil que ha existido. Era capaz de adaptarse a todos los estilos: a combates más técnicos, a otros más "guionizados" (o sea, más basados en la épica y en el storytelling), a brawls, a peleas multitudinarias, a todo tipo de gimmick matches... ¡Y siempre se sacaba un combatazo de la manga!

2) Por esa misma razón, ha hecho lucir a los rivales mejor que ningún otro. Es increíble la capacidad que tenía Flair de llevar a cualquier tipo de rival y sacarle lo mejor de sí mismo, ya fuera un técnico depurado, un gigantón, un high flyer, un brawler... No hay un tipo de luchador con el que no pareciera tener química.

3) En consecuencia, es el luchador que mejor vendía de la historia. Nadie ha hecho más creíbles y estéticos los golpes de sus oponentes, nadie nos ha hecho creer más y mejor en lo que pasaba dentro de las 12 cuerdas. Quizá el Shawn Michaels de los 2000 y el mejor Bret Hart han podido hacerlo igual de bien, pero no durante tantísimos años como Slick Ric. 

Dos macroleyendas dando una lección.

4) Con diferencia, ha sido el luchador que mejor ha manejado la psicología de ring. Ningún otro ha sabido darle a cada público, a cada rival y a cada combate lo que más necesitaba para hacerlo grande, ningún otro ha sido tan hábil extrayendo reacciones del público.

5) Poseía una técnica luchística más que competente. Sin llegar a ser tan extraordinariamente talentoso como un Kurt Angle, un Chris Benoit, un Ricky Steamboat o un Bret Hart, tenía un repertorio muy decente y lo ejecutaba con una elegancia y una limpieza que pocos han igualado. Es verdad que a veces podía parecer repetitivo, pero cuando la ocasión lo requería se sacaba unos cuantos ases nuevos de la manga, al menos en sus mejores años.

6) En cuanto al micro puede mirarse con cualquiera de los más grandes sin pestañear: Superstar Billy Graham, Roddy Pipper, Dusty Rhodes, Stone Cold, The Rock... no creo que ninguno de ellos sea mejor que el Nature Boy. Además, como dijo Triple H en el (por otra parte recomendadísimo) DVD Ric Flair and The Four Horsemen, Flair era tremendamente versatil: podía ser divertido, volverse loco, intimidar, ser el más chulo del lugar, mostrarse como un heel cobarde o como un heel fiero, como un face admirable... ¡o como el más despreciable del universo! 

¿Y las catchphrases?, ¿hay alguien que haya producido más lemas míticos y tan molones como él? “I'm a limousine ridin', jet flyin', kiss stealin', wheelin' dealin' son of a gun", "diamonds are forever, and so are The Four Horsemen","to be the man, you've got to beat the man!", "I'm the dirtiest player in the game"... ¡y tantas otras!

Para los escépticos, aquí os dejo unas pocas pruebas.


Hay veces en las que me tiro horas viendo viejas promos de este gigante.

7) Aunque su gimmick no es nada original, antes que él lo portaron Gorgeous George, Buddy Rogers y Nick Bockwinkel, sin duda ha sido quien mejor lo ha lucido, entre otras cosas porque como todos sabemos es una extensión de su propia personalidad. Verdaderamente Ric es el golfo, putañero, borrachín, juerguista dandy que aparenta ser. Es más chulo que The Rock, tan duro y bebedor como Steve Austin, más elegante que Rick Steamboat, más pendenciero que Roddy Pipper, más competitivo que Triple H, más infantil que el Shawn Michaels de los 90, más arrogante que Randy Savage y luce más su dinero que Alberto Del Río y Ted Dibiase juntos. ¿Quién no ha querido ser como él alguna vez?

8) Nadie, repito, nadie, nos ha dado tantísimos buenos combates, ni siquiera Shawn Michaels. La lista de combates de cuatro y cinco estrellas de este hombre es interminable. Con Harley Race, con Nikita Koloff, con Rick Steamboat, con Lex Luger, Sting, Kerry Von Erich, Terry Funk, Dusty Rhodes, Barry Windham, Magnum T.A., Antonio Inoki, Vader, Randy Savage, Roddy Pipper, Ted Dibiase, Rick Martel, Eddie Guerrero, Triple H, The Undertaker, HBK... ¡Inimitable!

9) Con la posible excepción de Hulk Hogan, ningún otro luchador ha participado en tantos feuds e storylines míticas. Sus feuds con Harley Race, con Dusty Rhodes, con Rick Steamboat, con Terry Funk, con Sting, con Hulk Hogan... la "retirada" tras el ataque de Bob Orton y Dick Slater, la formación de los Four Horsemen, el asalto a Dusty Rhodes en un parking, el intento de robarle la chica a Jimmy Garvin, la aparición en WWE con el viejo cinturón NWA, la victoria en el Royal Rumble 1992 saliendo en primer lugar, el montaje con las fotos de Miss Elizabeth para poner celoso a Randy Savage antes de su combate en Wrestlemania VIII, la pelea contra Vader en Starrcade'93 que consiguió salvar la WCW, la guerra contra la NWO, aquel épico regreso tras más de un año marginado de WCW por Eric Bischoff, la saga Evolution, la storyline de su "retirada" en 2008 con aquel increíble combate de Wrestlemania XXIV y la despedida más emocionante de todos los tiempos, que a este que escribe le hizo derramar unas pocas lágrimas... Tantos y tantos momentos mágicos...    

El momento en que todo debió acabar...

10) Porque es el alma y único elemento constante del primer y mejor stable que ha existido: los Four Horsemen. Y un carajo para la NWO, D-Generation X y cualquier otro, los Horsemen, especialmente los de los 80, son lo más grande que ha habido y habrá.

Qué queréis que os diga, a lo mejor estoy ciego de admiración por él, pero cada día que pasa soy más fan de  Ric Flair. Como Loquillo con los Stones, no fue al principio santo de mi devoción, hulkmaníaco convencido como era de niño (de siempre en EE.UU. había una especie de "guerra fría" entre fans de Hogan y de Flair, algo así como ser de los Beatles o de los Stones). Pero según he ido creciendo me ha ido conquistando más y más... Y aún lo hace.

Eso sí, he usado el tiempo pasado porque me resisto a creer que este hombre al que tanto admiro siga empeñado en subir a un ring, pisoteando su leyenda. Ya su storyline de retirada en 2008 llegó dos años tarde,  pero consiguieron que fuese tan fabulosa... ¡me parece increíble que habiendo logrado acabar así, el sueño de todo profesional, lo haya estropeado volviendo una vez más!

¡Imposible tener más clase! 


En fin, es tan grande que se lo perdonamos todo. Porque por mucho dinero que le demos, jamás le conseguiremos corresponder a todo lo que nos ha aportado. 

¡¡¡WOOOOOOOOOOO!!!

miércoles, 9 de noviembre de 2011

La experiencia es un grado

Y además es guapo a rabiar... ¡Te echamos de menos, Chris!

No soy nada original si digo que me encanta Chris Jericho. Es uno de los luchadores favoritos de todos, de esos pocos elegidos que trascienden gustos particulares. El tipo es tan completo (técnica depurada, completo dominio de la psicología de ring, storyteller de primera, micro espectacular, carisma a raudales...) que es difícil no ser fan suyo. Y encima, sin duda ha mejorado con los años. Un crack, en resumen.

Personalmente, además tengo otros dos motivos para que me caiga estupendamente. Uno es que, como el que viste y calza, Jericho es un rockero old school de los que ya no quedan (a los que no los hayan visto les recomiendo sus apariciones como presentador en VH1 y MTV). Otro es que cuanto más lo leo, más me convenzo de que Jericho es uno de los luchadores más inteligentes y con la cabeza mejor amueblada. Aún no me he leído sus libros, aunque todo el mundo los pone por las nubes. De momento, me conformo con sus siempre interesantes entrevistas, de las que a menudo puedes extraer auténticas perlas de sabiduría luchística. Un ejemplo más, extraído de la entrevista publicada ayer en lords of pain:

Entrevistador: ¿Qué opinas del estado actual del wrestling profesional? Parece que el monopolio de facto de la WWE lo está perjudicando...
Jericho:  Es una cuestión de experiencia. Creo que mi generación fue una de las mejores porque viajamos por todo el mundo aprendiendo diferentes estilos antes de llegar a la WWE. Ahora hay un montón de chicos que tienen menos de cinco años de experiencia. No creo que yo supiera de verdad, de verdad lo que estaba haciendo en cuanto a hacer reaccionar a una audiencia hasta que volví en 2008. No me entiendas mal, hice un gran trabajo antes de eso, pero no fue hasta entonces que en ciertas noches sentía que era el mejor del mundo. Lleva años llegar a ser verdaderamente grande en algo, y esos chicos no tienen ni siquiera cinco años de experiencia, no digamos ya diez o quince..."
Cuanto más leo, más me reafirmo en que mi diagnóstico sobre los problemas de la WWE actual (extrapolables como ya hemos dicho, a TNA) es bastante acertado. Se carga a los chavales, a gente jovencísima (recordemos lo jóvenes que eran los Randy Orton, Ken Doane o Carlito por poner sólo 3 ejemplos, cuando saltaron a la primera plantilla de WWE), con una responsabilidad para la que no están preparados. Y si no causan un impacto inmediato, se les echa. Claro, la mayoría fracasa. Porque así no se hacen las cosas.

En fin, os recomiendo que leáis el resto de la entrevista, porque no tiene desperdicio. Especialmente la parte que habla de las drogas y las muertes de luchadores, un tema del que antes o después quiero escribir en este blog.

Una generación espléndida sin duda. Que pena da ver estas fotos.

P.D.: A todo esto, el rating de RAW sigue bajando y perdiendo espectadores en su segunda hora. A pesar de ello, ni un mínimo cambio de dirección en el bookeo, por ejemplo dejar de poner a Cena en el main event de RAW. ¿Para qué?

lunes, 7 de noviembre de 2011

Sobre el feud Roode-Storm

¿Feud de la década o cagada de la década? No sé qué pensar...

Lo confieso, no sé cómo valorar lo que TNA está haciendo con Bobby Roode y James Storm. Por una parte, tengo la más que desagradable sensación de que estamos ante la enésima cagada de booking motivada por las prisas y el poner por delante el corto plazo. Ya vistéis mi reacción ante la victoria de Storm sobre Kurt Angle, que critiqué sin piedad en el blog. Luego, vi que los ratings mejoraron y pensé, "bueno, quizá se saque algo bueno de todo esto". Al poco, leo los spoilers de las grabaciones de Impact! y salta la noticia de que Roode ha derrotado a su supuesto compañero, hecho un semi turn heel y ganado el ansiado título TNA... Lo primero que se me vino a la cabeza fue "han visto que lo del cambio de título les ha funcionado subiendo los rating y ahora lo van a hacer cada dos semanas". Vamos, usar por una vez los spoilers para que jueguen a tu favor, lo cual puede ser una buena estrategia una o dos veces, pero un desastre en poco tiempo si se abusa del mecanismo. 

Por otra parte, no pude evitar sentirme algo impresionado. ¿Y si nos la habían jugado desde el principio?, ¿y si esto estaba pensado desde las BFG Series?, ¿y si hubieran ido poniendo el cebo para que picásemos? La verdad, nadie esperábamos que pasara lo que estaba pasando, no así. Y lo que es más importante, reconozcámoslo, la idea molaba. Así pues, decidí esperar a comentar nada hasta ver el Impact! correspondiente.

¡Qué poco te ha durado la fiesta James!... ¿O no?

¿Veredicto? No lo sé. La cabeza me dice "probablemente sea una cagada". ¿Qué pensar si no viendo que le dedican también un huevo de tiempo a la estupidez esa del hijo de Bischoff que no nos importa a nadie? Pero las entrañas me dicen que el combate me encantó, que me pica la curiosidad de ver qué pasa a partir de ahora, que mi boca dibujó una gran O cuando me enteré de que Roode había arrebatado a su ex compi el cinturón mundial... Por lo que, de momento, escojo creerme que lo tenían todo preparado, y que se lo han currado tela.

Porque amigos, uno se hace fan para disfrutar, no para criticar por Internet. Criticar es un medio, no un fin en sí mismo. Si uno no disfruta como debiera, pues critica, comenta lo que le parece mal, trata de proponer soluciones. Pero si te lo pasas bien, porque por si alguien no lo recuerda para eso está el wrestling, ¿para qué buscarle tres pies al gato? Así que toca subordinar el cerebro a los intestinos, con gusto además. De momento, habéis ganado mi atención, señores de TNA.

Campaña de firmas para echar a este tipo de las storylines de TNA YA. ¿Quién se apunta?

Ahora bien, sin perder del todo la cabeza, porque al fin y al cabo para eso abrí este blog, se han corrido muchos riesgos, por lo que merece la pena exigir a TNA que continúe la historia no bien, sino aún mejor. Si todos los vaivenes y aparente booking sin cabeza era una gigantesca jugada de despiste para llevarnos aquí, bienvenidos sean. Pero, como dice Francisco Cornejo en Solowrestling, si se ha devaluado el título, se ha enviado a paseo las BFG Series y se ha separado a la mejor pareja de los últimos 10 años por pura improvisación... 

Bueno, mejor no pensar en ello, relajarse y disfrutar. Porque quizá estemos ante lo que, por fin, pueda ser la piedra de toque en torno a la que se construya una TNA diferente y mejor. Roode y Storm pueden ser los Austin-Rock, Hogan-Savage o Hart-Michaels de la empresa de Orlando... Mierda, ya me estoy haciendo ilusiones otra vez. Me prometí que sería menos impulsivo después de que la WWE rompiera mi corazón por enésima vez. Y ahora voy y me entrego a los brazos de la primera fulana que me ofrece una relación seria, ¡con lo fea que me parecía!

En fin, es mejor haber amado y perder, que no haber amado nunca...

jueves, 3 de noviembre de 2011

Pffffff!

Vince es más gracioso cuando no se lo propone...

Declaraciones del emperador mundial del wrestling (leído en lords of pain.net):

"Vince MacMahon contó por qué el canal de WWE será un éxito, y criticó el canal de Opra Winfrey, al que calificó de fracaso. Vince afirmó que Opra se limitó a poner su nombre a un canal en vez de darle a los fans lo que quieren, un error que la WWE no piensa cometer".
Hay que joderse, lo cínicos que pueden llegar a resultar los ricos. O a lo mejor es que están tan separados de la realidad que no se enteran de nada. O ambas cosas.

Mucho más real, este artículo que os recomiendo, aunque sólo sea porque está en línea con mis tesis sobre el monstruoso fracaso de la WWE en este 2011, especialmente en la cuestión de CM Punk. :-)

martes, 1 de noviembre de 2011

El número de PPV's a debate

¿Se desarrollaría mejor el feud entre estos dos hombres con menos PPV's?

Leo en Solowrestling.com un interesante artículo del siempre estimulante Alex Fernández. En él, el autor defiende que TNA debería reducir a la mitad el número de sus PPV anuales, dejándolo en seis. Argumenta que así habrá más tiempo para desarrollar las storylines y más espacio para la mid y la lowcard, que estarían viendo limitado su tiempo en los Impact! semanales desde que Bruce Pritchard asumiera el cargo de booker principal. Además, afirma, las cifras de venta de los PPV de TNA son tan bajas que de esta forma probablemente crecerían, al haber más expectación y "sensación de exclusividad". O sea, la impresión de que un PPV es mucho más que un programa semanal, algo de lo que TNA siempre ha ido floja, como ya dijese en este blog, y que cada vez es más frecuente en WWE, más que nada por su patético booking (no hay más que ver el lamentable RAW de anoche).

La verdad, no sólo estoy de acuerdo, sino que creo que la WWE debería plantearse hacer lo mismo, y por las mismas razones. En una etapa de fuerte crisis económica, pedir a la gente que se gaste decenas de dólares o euros en PPV's tan flojos como los que a menudo oferta la WWE me parece una estafa, además de un error financiero. Cierto es que las cifras de ventas de PPV's de la WWE siguen proporcionando una enorme rentabilidad a la empresa de los McMahon, y eso cuenta, y mucho, en una gran corporación que tributa en bolsa como la WWE. Pero con cuatro programas semanales, creo que la WWE tiene espacio más que sobrado para desarrollar a toda su plantilla y permitirse reducir drásticamente el número de PPV's.

 Estoy convencido de que con menos PPV los tag team tendrían un espacio más digno en los mismos.

Es verdad, cuando empecé a ver lucha libre y sólo había cuatro PPV anuales y los programas semanales se nutrían de peleas de estrellas contra jobbers, soñaba con más eventos especiales y más combates entre las grandes figuras del roster. Con los años mi deseo se ha visto harto cumplido, pero el resultado, como casi todos los deseos que se hacen realidad, no ha sido el apetecido. Creo que hay que recuperar la sensación de que algo especial va a pasar cuando se acerca un PPV. Y eso sólo es posible reduciendo su número, que recuerdo ha llegado hasta la grotesca cifra de 16 PPV en un sólo año, 2006. Volver atrás en el tiempo, a los años de mi infancia, no creo que sea posible, ni siquiera deseable. Pero con un máximo de ocho PPV anuales, siete más un par de programas especiales tipo "Saturday Night's Main Event" sería mi número ideal, creo que podría recuperarse algo de aquella magia perdida. No creo desde luego que eso supusiera una mejora instantánea, en especial teniendo en cuenta la deriva creativa de WWE, pero sin duda ayudaría. 

¿Y vosotros, qué pensáis al respecto?