domingo, 30 de octubre de 2011

TNA: lo bueno

Vale, esto mola. Pero no sólo de volteretas vive el wrestling...

Después de tanta crítica y tanta bilis, va siendo hora de que hablemos también de lo bueno que ha aportado TNA en estos casi diez años que la promoción lleva abierta. Al fin y al cabo, no iba a dedicarles tantos post si no creyera que merece la pena, aunque sea un poquito. Y cuando se habla de lo bueno de TNA, inmediatamente vienen dos palabras a la mente: X-Division. No son pocos los que opinan que la famosa división "sin límites" representa la verdadera esencia de la empresa de Orlando, y que es gracias a ella que hoy día sea la segunda promotora de wrestling en EE.UU.

Supongo que es cierto. Pero discrepo enormemente de aquellos que piensan que el futuro de TNA pasa por que la X-Division sea el centro de la promoción. Que sí, que me molan las cabriolas, los saltos mortales, el wrestling aéreo y la acción trepidante. Pero no dejo de ser un fan old school. Lo que más me gusta del wrestling es la épica y el componente de telenovela que tiene. La lucha libre basada en spots no me hace gracia, la verdad. Como a cualquiera, me agrada ver un combate de ese estilo aquí y allá, generalmente para abrir un show. Pero no que lo sea todo. Es por eso que nunca me ha terminado de enganchar la lucha libre mexicana y el puroesu. Se me tuerce el gesto cuando veo más de un combate en el que apenas hay psicología, en el que un luchador recibe un 450º Splash y a continuación se levanta para hacerle un moonsault al rival. No puedo con eso, la verdad.

Estéticamente impecable. Luchísticamente  no indiscutible.

No sé, es verdad que vivimos una época en la que los productos culturales más exitosos son aquellos caracterizados por mantener un ritmo frenético y centrarse más en la espectacularidad de las hechuras que en el contenido que presentan. El videojuego y el spot publicitario son los modelos culturales de referencia, y a ellos se adaptan cada vez más el cine, el comic y a veces hasta la novela o el arte contemporáneo (véase si no el auge de la perfomance, con su énfasis en lo efímero, lo irrepetible de la experiencia y lo epatante). Es posible que el wrestling del siglo XXI tenga que emplear también esos moldes, nos guste o no a aquellos que hemos crecido con otros patrones culturales. La X-Division es un poco eso, así que quizá "comercialmente" tengan razón quienes creen que debe ser el centro de TNA.

Hay sin embargo un precedente que puede desmentir un tanto esa idea. No sé si recordáis la breve andadura de Wrestling Society X, aquella promoción con la que MTV trató de introducirse en el mundillo. Era un perfecto ejemplo de ese posible wrestling futurista, sin psicología, sin desarrollos largos de storylines, sin dar un respiro al espectador ni dentro ni fuera del ring. Y se la pegó bien pegada. Por otro lado, si hay algo que está robando espectadores al wrestling, esas son las MMA, que no se caracterizan precisamente por un ritmo trepidante. Así que la cosa no está tan clara.

AJ, un buen modelo del tránsito de la X-Division al estrellato

Yo creo que la X-Division debería mirarse en el espejo de la exitosa división cruiser de la WCW: su espectacularidad es un buen escaparate para figuras jóvenes y hambrientas, que de allí pueden saltar a cotas mayores si tienen lo que hay que tener. Como en su día hiciesen Eddie Guerrero, Chris Jericho, Dean Malenko o Rey Mysterio. O en la misma TNA los AJ Styles, Samoa Joe, Christopher Daniels o incluso los Motorcity Machine Guns de mi admirado Chris Sabin, mi favorito de siempre de la X-Division. Son luchadores que han sabido crecer más allá de los festivales de spots, aunque empezaran en esas lides. Eso es lo que en mi opinión debería seguir suponiendo la X-Division para TNA: una buena bandera de enganche para mucha gente, pues su vistosidad puede atraer tanto al aficionado casual como al hardcore fan, y al mismo tiempo una cantera de futuras estrellas.

Otra cosa es que desde la llegada de Vince Russo, y mucho más en la oscura era de Hogan y Bischoff, la X-Division no sea ni una cosa ni la otra. Ni el centro de todas las miradas, ni una atracción importante, pero secundaria. Actualmente es poco menos que nada. Ya digo que me parece que la X-Division está un tanto sobrevalorada por algunos aficionados, pero es indiscutible que ha sido una de las claves más importantes del relativo éxito de TNA. Cargársela como se la han cargado me parece una de las decisiones más nefastas de estos tres caballeros.

Chris Sabin, una debilidad personal. Creo que merece más de lo que tiene.

Dicho esto, diré que lo que siempre me ha encantado de TNA, en lo único que creo que ha dado sopas con onda a la WWE durante los últimos diez años, es en su división tag. En una era en la que, con dos campeonatos y todo, la WWE se ha empeñado en mandar a paseo el wrestling por equipos, TNA siempre contó con tags magníficos y les dio importancia en sus programas: America's Most Wanted, Triple X, Team Canada, The Naturals, 3LiveKru, LAX (¡que patético remedo de ellos son los Mexican America!), Beer Mooney, The Motorcity Machine Guns... hasta los Dudleys han acabado dando un buen espectáculo tras unos primeros años dubitativos en la empresa de Panda Energy. Incluso parejas más o menos circunstanciales, como aquella formada por AJ Styles y Christopher Daniels, han dado feuds molones. Para un fan de la vieja escuela como yo, ver el wrestling por parejas en el lugar que le corresponde ha sido uno de los mayores alicientes para no mandar a TNA a tomar vientos pese a lo mucho malo que, por lo general, nos ofrecen.

Y por último, también me gustó la división Knockout en su momento. Tanto, que me pareció casi lo mejor de la etapa de Russo como booker principal, antes de que llegaran Hogan y Bischoff al poder (más o menos entre 2006 y 2009). Y no debe ser a mí solo, porque por regla general las Knockouts solían llevarse los ratigs más altos de los Impact! O sea que sí, que por mucho que piensen algunos, la lucha femenina interesa y se pueden hacer cosas chulas con ella. Aunque por supuesto TNA nunca ha renunciado a usar sus chicas como pedazos de carne para reclamo del fan pajillero, al menos no se limitaba a hacer pasar la lucha femenina por desfiles de modelos o concursos de bikinis. Durante un tiempo, las Knockouts mostraron que con tiempo y guiones interesantes podían dar mucho de sí, y muchos lo agradecimos.

Convendremos que, al menos hace unos años, la belleza no era el único criterio para ser campeona femenina en TNA.

Vamos, que lo que a mí me parecía que TNA era fuerte es precisamente en aquello que la WWE lleva una  década siendo débil: en su división ligera, en su división femenina y sobre todo en su división tag. Y curiosamente, las tres han sido maltratadas hasta reducirlas a su insustancial estado actual por Russo, Hogan y Bischoff. Bien hecho genios. Habéis estropeado aquello que podía hacer a TNA diferente de WWE. Y en cambio, habéis querido competir con el gigante de Connecticut con sus mismas cutres armas, pero con menos medios. El resultado, a la vista está.

Pero bueno, ahí están ellos renovando y cada vez con más poder. ¿Alguien lo entiende? No. La ausencia de justicia es tan real en el wrestling como en cualquier otro aspecto de la vida...

martes, 25 de octubre de 2011

No quiero ser pesado...

Que tiempos aquellos. ¿Os acordáis de cuándo CM Punk era la estrella de RAW?

Pero es que tras leer los resultados de Vengance y el pasado RAW se te quitan las ganas de hacer el esfuerzo de verlos. Paso de concederles el beneficio de la duda. Os lo dije y me reafirmo, la WWE no tenía ninguna intención de promocionar a Punk, por mucho que ellos nieguen la mayor. Ya todo es Triple H (que insisto, ha expropiado una storyline que creó CM Punk de la nada), además del Cena-Rock. Vamos, lo que de verdad querían promocionar.

Luego, claro, Del Rio y Punk pierden espectadores. ¿Cómo no los van a perder? Si no les das importancia, si el campeón de la WWE es menos que los de siempre, si no creas una historia chula, si te olvidas que hasta la noche anterior The Miz y R-Truth se supone que eran importantes para lo que estaba pasando y si encima haces que hasta CM Punk se baje los pantalones delante de ese carismático GM que es Lauritaitis mandando definitivamente a paseo su gimmick de rebelde... pues lo normal es que la gente se baje del carro, claro.

Bah, paso.

sábado, 22 de octubre de 2011

La prehistoria de Ric Flair


Otro paréntesis en mi larga saga sobre TNA. Buscando viejos combates de la AWA, una de mis promociones favoritas de siempre, he encontrado lo que parece ser el primer combate del gran Ric Flair. Y aunque ya se aprecian algunas maneras que con el tiempo le convertirían en mito, me he quedado boquiabierto al ver lo barrilete que estaba. Había visto algunos combates y promos de 1975 y 1976, pero nunca imágenes en las que estuviese tan gordo. ¿Es que adelgazó después de su famoso accidente de avión de 1975? Flair ha dicho muchas veces que aquel desafortunado castañazo le cambió la vida, puesto que los médicos le dijeron que no podría volver a luchar, a lo que él respondió redoblando sus esfuerzos por ser una estrella. El resto es una historia que continua incluso hoy día. 

¿Alguien más tiene o ha visto combates de aquella época que nos permitan confirmar o desmentir la mayor?

jueves, 20 de octubre de 2011

Por si acaso...


Con esa planta es imposible no apreciarle...

Como lo escribí un poco a tontas y a locas, me he dado cuenta de que el post de ayer puede llevar a confusión. Así que por si acaso lo aclaro: James Storm me gusta, me gusta bastante, y de hecho no sabría decir si más que su compañero en Beer Money. Coño, más que decente en el ring (tanto en la técnica como en la psicología), micro como poco aceptable y un gimmick atractivo, poco original eso sí, pero que él ha sabido llevar espléndidamente. No, no me parece mal que James sea campeón de TNA. Lo que me parece una catástrofe mayúscula es el modo en el que le han hecho campeón, cepillándose de un plumazo meses de bookeo.

De hecho... bueno, veremos si esta forma de ganar el título no le pasa factura. Muchas veces un campeonato mal ganado lejos de propulsar carreras las ha arruinado. Que se lo digan si no a Ron Garvin o a Jack Swagger. Sin promoción previa, sin estar siquiera cerca de los main events... buff, no sé. Es verdad que tiene mucho recorrido tras él, pero como sabéis soy amigo del bookeo paciente, lo cual requiere que un campeón se construya pasito a pasito. 

En fin, el daño ya está hecho, así que mejor mirar al futuro. Para mí sólo hay un camino a seguir a partir de ahora: un reinado largo y sólido para el Cowboy. Cualquier otra cosa, especialmente perder el cinturón pronto y ante un Jeff Hardy o un Mr. Anderson cualquiera, supone... bueno, no se me ocurren más sinónimos de desastre, ¿hecatombe quizás? Y la verdad es que, por enésima vez lo repito, la dirección creativa de TNA y la experiencia previa de la empresa no nos invita al optimismo. Veremos.

Joe le dice a James: cuidadín, cuidadíiiiiin....

miércoles, 19 de octubre de 2011

AVISO: SPOILERS.

No me resisto a ponerlos y a hacer un breve comentario, ni fotos voy a poner para no dar pistas. Primeros spoilers del Impact! post BFG, podéis leerlos aquí y aquí.

¿Ya? Bueno, pues para quienes se hayan animado a leer hasta aquí... Bien, el domingo dije que quería comerme las palabras vertidas en aquel post. Y al final me tengo que comer no esas, sino las que escribí antes de ayer. Y no es plato de gusto, porque de veras que tengo muchas ganas de que TNA crezca. Pero es que... madre mía. James Storm campeón en 3 minutos y sin promoción, cuando el hypeadísimo Roode no pudo en 20 y tras ganar las BFG Series. Ahora sí, de un plumazo se han cargado todo el bookeo de los últimos meses.

De lo demás, ¿para qué? Lo de Hogan no merece la pena. Por si me faltaba convicción, TNA parece que se esfuerce en demostrármelo. Ni TNA ni WWE tienen remedio. Me reafirmo en lo dicho, hace falta una revolución en el wrestling.

lunes, 17 de octubre de 2011

Un apunte sobre Bound for Glory

Don't suffer Bobby

No he visto Bound for Glory, sólo he leído los spoilers de los resultados. Las opiniones sobre el evento están divididas, predominando la impresión de que aunque a nivel de combates no estuvo mal, el bookeo siguió siendo desastroso. Vamos, algo parecido a lo que sucede con los últimos PPV de la WWE. Dada la trayectoria de la empresa no me extrañaría que fuera así, y en general desde fuera da esa impresión, en especial lo de Hogan y Sting. Pero como no lo he visto, prefiero abstenerme de decir nada más.

Simplemente quería apuntar algo: para mi gusto sí que tiene sentido que Bobby Roode perdiera, y desde luego no creo que a priori (y subrayo lo de a priori, ver más adelante) eso tire por tierra su push. Para mí es lógico que un luchador nuevo en la cima pierda su primer asalto al título, más si es face. Eso da margen a construirle aún más como gran estrella, si se le enfoca bien. Históricamente, eso ha dado lugar a grandes storylines, en las que un luchador va creciendo en su camino a la gloria, como sucedió con Jeff Hardy en 2007-2008 en la WWE. Y antes de él Shawn Michaels, Steve Austin, Sting a finales de los 80, etc.

Habría que poner esta foto aunque Velvet hubiera perdido.

Yo creo que TNA tiene una muy buena oportunidad de hacer crecer a Bobby Roode como un main eventer de tomo y lomo. Es más, yo le daría todo un año de plazo, hasta el BFG del año que viene, si es posible derrotando por el camino a Kurt Angle, y digo por el camino porque con el objetivo de ir a las olimpiadas es difícil que Angle sea su antagonista entonces. Y por supuesto, teniendo un gran feud con su aún compañero James Storm, lo cual ya se intuye en los últimos Impact. Ahora bien, para eso hay que tener mucha paciencia, cosa de la que no andamos sobrados en el wrestling actual, ni en WWE, ni en TNA. Y como ya dijese unos meses atrás, un cuidado exquisito a la hora de planificar tanto el desarrollo como el remate de todo el angulo, y tampoco es que la dirección creativa de TNA invite a darles mucha confianza...

Cosa bien distinta, por supuesto, es que de golpe y porrazo se olviden del push a Bobby, que ciertos peces gordos de la empresa "opinen" que no está preparado para ser campeón, o peor, que todo el circo en torno suyo no hubiera sido más que una enorme cortina de humo mientras esperaban a que Jeff Hardy saliera de la trena, porque es su verdadera apuesta como campeón. Posibilidades todas ellas ni mucho menos descartables teniendo en cuenta la deriva de la empresa. En fin, veremos que pasa a partir de ahora.

domingo, 16 de octubre de 2011

TNA: Por qué tanta bilis...

He aquí uno de los lemas más engañosos de la historia del marketing

Es verdad, no lo puedo negar. Le tengo manía a TNA, lo confieso. Y estoy seguro de que no soy el único, habida cuenta de la inusitada dureza con la que muchos miembros de la IWC (uséase, Internet Wrestling Community, o en cristiano "comunidad de internautas aficionados al wrestling") nos ensañamos con la empresa de Panda Energy. ¿Por qué?, ¿Por qué si TNA no es más que la WWE pero más cutre nos metemos tanto con ella? No es sencillo de explicar, y supongo que cada uno tendrá sus razones. He aquí las mías.

Hace no mucho escuché un programa de Solowrestling radio, lamento no recordar cual, en el que uno de los comentaristas decía que muchos nos metemos con TNA porque es más fácil meterse con el segundón que con el más fuerte. Pudiera ser. Para algunos, pero no para mí. Mi problema con TNA es el mismo que tengo con los grupos indie o con el cine de Isabel Coixet y similares directores: la hipocresía. La absoluta separación entre lo que se proclama y lo que se ofrece. El ir de independientes, de defensores de la calidad y la pureza cuando uno no es más que un enchufado, un subvencionado, un niño bonito de ciertos medios de comunicación.

Con un ánimo un poco troll: siento lo mismo viendo un anuncio de "Wrestling Matters" que con fotos como esta.

Y sobre todo, odio, ODIO, esa actitud de superioridad moral sobre la masa, esa bestia borrega e inculta que no sabe apreciar lo bueno. Lo suyo, claro. Peor aún: todos sabemos que esa actitud displicente hacia lo mainstream es pura pose, que en el fondo desean ardientemente ser los primeros, vender más que nadie, estar bajo los focos. TNA es así. Llevan vendiendo el cuento de la calidad desde su misma fundación, mientras por otro lado hacen las mismas mongoladas que la WWE contemporánea. Y eso amigos, no se lo perdono.

La campañita de marras "aquí el wrestling importa" ha representado el pico de esta farisea actitud, no por casualidad coincidiendo con la época en la que el wrestling importa menos en la compañía. Pero como tantas otras cosas en TNA, siempre ha sido así. No hay más que recordar el coñazo que nos han dado con la puñetera X-Division, o las cientos de declaraciones de wrestlers hablando de lo bonito que era estar en la familia TNA en contraste con la fría malignidad que es trabajar para WWE. Mientras tanto, muchos luchadores, jóvenes y viejos, tomaban en cuanto podían las de Villadiego de vuelta al gigante de Connecticut. Qué sorpresa.

TNA le molaba tanto a Christian que salió de allí en cuanto pudo.

Pero vamos, que soy el primer interesado en que a TNA le vaya bien. De no ser así el hipócrita sería yo, que he defendido con ahínco que gran parte de los problemas del wrestling contemporáneo derivan de la falta de competencia entre grandes empresas del mismo ramo, lo que ha ido desviando el interés del wrestling a otros derroteros, en WWE como en TNA. Quizá eso es algo que me jode aún más de TNA, el que presente un producto tan malo cuando lleva teniendo toda la década a una irregularísima WWE a tiro.

Así que nada, más nos vale a todos los aficionados que TNA despierte de una vez y empiece a suponer una amenaza real a la posición de privilegio de la WWE en el wrestling mundial. Personalmente soy pesimista, como ya he dicho, y las noticias no invitan a otra cosa. La última que AJ Styles ha estallado contra Hulk Hogan, de lo cual ya iba siendo hora. Por otro lado, como ya sabemos Hogan y Bischoff han renovado con TNA, Russo sigue por ahí y el elegido para sacar la nave a flote, Bruce Pritchard, no es que me genere mucha ilusión.

 In Bobby we trust 

Peeero, he de confesar que me gusta lo que están haciendo con Bobby Roode. Siempre me gustó -no diré más para que no me acusen de remar a favor de corriente- y me parecería muy acertado que construyesen el futuro de la empresa en torno suyo, sobre todo porque AJ Styles y Samoa Joe parecen casos perdidos (y por cierto, malos precedentes para el bueno de Bobby, como bien vio Alex Fernández en Solowrestling). También me gusta Crimson, aunque creo que se han precipitado un poco con su push. Una primera medida inteligente en cualquier caso sería empezar a confiar en talentos jóvenes y de la casa, en lugar de por la típica ex estrella de WWE, que tan mal resultado les ha dado hasta ahora.

Y en total, que de verdad espero que de algún modo este Bound for Glory suponga el principio de cambios muy necesarios para TNA... y que de serlo suponga un verdadero punto de inflexión, no como el de otros. De verdad que tengo muchas ganas de comerme con patatas todo lo dicho en este post. De verdad que sí.  

jueves, 13 de octubre de 2011

Parece que no soy yo solo...

 Ya sé que me repito, pero la ocasión lo merece.

Supongo que ya sabréis la noticia, pero por si acaso la cuelgo, vía Solowrestling:
El WWE Raw del Lunes, 10 de Octubre, marcó una audiencia de 3.25, subiendo así dos décimas respecto a la semana pasada y marcando el dato más alto desde el 15 de Agosto, la noche post-Summerslam. Esto muestra un fuerte interés en el desarrollo de la historia en la que el roster da la espalda a Triple H.

La otra gran historia que se desprende de los datos de audiencia es la caída de un 13% en la audiencia de la segunda hora comparada con la primera. Es la caída más fuerte de los últimos cuatro años.

De forma global, el Raw tuvo 5.02 millones de espectadores. La primera hora tuvo 5.38 millones de espectadores, la más alta desde el 23 de Mayo. La segunda se derrumbó hasta los 4.67 millones, mostrando una clara pérdida de interés en la evolución del show reflejándose en los 700000 espectadores que decidieron cambiar de canal.
O sea, que no soy el único que ve cómo una y otra, y otra, y otra vez la WWE se empeña en destruirse a sí misma, planteando ideas brillantes que al poco pisotea miserablemente. Ahí está la prueba: la gente tenía interés en la storyline de los luchadores en huelga contra Triple H, pero en cuanto vio el monstruoso desastre con el que pretendieron continuar el ángulo, prefirió ver futbol americano. Y el desglose de audiencias cuarto por cuarto confirma esta interpretación.

Exactamente igual que se tenía interés en la historia sobre la salida de CM Punk en primavera, pero la mala gestión de la misma fue haciendo perder espectadores por el camino según avanzó el verano. Y tantas otras veces en los últimos años. Dado el declive continuado de las cifras (de todas: ratings, venta de PPV, asistencia a eventos, entradas a web, precio de las acciones...) de la empresa de los McMahon, parece que tampoco soy el único que está hasta los cojones de que me hagan lo mismo una y otra vez. La paciencia se va acabando, y al final más y más gente acaba mandándoles a tomar vientos. Lo cual debería preocupar, y mucho, a una macrocorporación en la que los números cuentan tanto últimamente.

 Iba a hacer un comentario sobre estrellas y estrellados, pero mejor no caer en más tópicos...

No me sorprende tampoco esta otra noticia que vuelve a contarnos que el guión de RAW se reescribió varias veces... para al final tomar una decisión improvisada y en el último minuto. No es la primera vez que se comenta en los últimos tiempos y viene a confirmar lo que vengo defendiendo desde que abrí este blog: que buena parte de los problemas del wrestling contemporáneo vienen de esta paradójica mezcla de impaciencia y énfasis en el control, tan típica del capitalismo neoliberal. Escribir ocho versiones distintas de un guión para hacer al final lo que se le ocurre al mandamás en el último momento, es que es ridículo. Como los tiempos que vivimos.

En fin. La WWE como metáfora de la vida misma. Al igual que en la vida real, la crisis de la WWE es estructural y no se le ve salida a corto, medio y hasta largo plazo. Y al igual que en la vida real, la única solución que se les ocurre es mantener intactas las recetas que provocan la misma crisis: si el enfermo ha tomado tres litros de jarabe que no sólo no le han curado su gripe, sino que encima le han jodido el sistema digestivo, su problema real no es el que el jarabe no funcione, el problema es que no ha tomado el suficiente jarabe lo suficientemente rápido. Manda cojones.

En la vida real, la crisis del sistema financiero amenaza con arrastrarnos al barro a todos. La crisis de la WWE amenaza con mandar a todo el mundillo del wrestling a freir espárragos. ¿Encontraremos la alternativa a una y otra? Sólo el tiempo lo dirá. Pero la cosa no tiene buena pinta.

Como en todo lo demás, hace falta que en el wrestling se produzca una revolución en toda regla...

martes, 11 de octubre de 2011

Me había prometido no volver a hacerlo...

Así es como deberíamos dejar las audiencias de los shows de WWE: VACÍAS.
 
Sí, ya lo sé. Sé que había jurado y perjurado que no volvería a hacerlo, pero es que el ridículo clama al cielo. Me estoy refiriendo por supuesto al RAW de anoche, enésima vez en el que una buena idea a priori acaba en papel del water. La huelga de luchadores, aunque los motivos eran estúpidos (lo que viene a ser una parodia de las luchas reales que se desarrollan en los USA en estos momentos, cuyas razones supongo la WWE considera igual de estúpidas dado el fachoso sentido del humor que predomina en sus programas), era algo original que tenía buena pinta. Pero en mi estado actual de descreimiento, estaba seguro de que no podía acabar bien. A veces es una mierda tener razón.

En fin, ya veis que la idea ha durado una triste semana. Tan rápido como vino, se ha ido. Aunque, como el Cid Campeador, ha logrado llevarse por delante meses de booking después de muerta: Ahora CM Punk y Triple H son amiguitos, tres meses de Triple H como jefe de operaciones tirados a la basura, lo de Kevin Nash para qué, Vince McMahon vuelve para echar al que le echó (no se sabe en calidad de qué, dado que supuestamente fue "relevado de sus funciones" hace tres meses), Miz y Truth vuelven y ya está, otro Cena-Del Río in the making, los misterios del micrófono y la jaula como si nada, del General Manager anónimo ya nadie ni se acuerda... Un despropósito tras otro, y luego otro.

Quien quiera ver aquí "un plan mayor" que siga engañándose a sí mismo. Por mi parte, sigo en mis trece: que les den.

Jeto de Laurinaitis después de ver el RAW de anoche. ¡Jooooder que espanto!

jueves, 6 de octubre de 2011

TNA y la memoria histórica

Una de las peores ideas que ha tenido el tandem Hogan-Bischoff: darle el título principal de TNA a un luchador tan demodé como Raven... Espera, ¡si eso pasó muchos años antes de su llegada!

¡Ah, la memoria! Esa zorra tramposa que juguetea melosa en nuestro cerebro, haciéndonos creer que vivimos lo que no vivimos, implantando recuerdos que, ¡ay! son tan distintos a lo que realmente sucedió. Aquella historia de amor que nunca fue bien; aquellas noches de juerga en la que nos creíamos bucaneros de otra época labrando su propia leyenda, cuando no eramos más que idiotas borrachos; aquella épica noche bajo la lluvia, cuando pensábamos estar rodando un imaginario videoclip, mientras que los demás sólo veían a un pringao que se estaba mojando...

¿Que a qué viene esta chorrada y qué tiene que ver con TNA? Viene a cuento de un artículo de opinión que apareció en Solowrestling.com acerca de la posible marcha de Hulk Hogan y Eric Bischoff de la empresa de Panda Energy, valorándola positivamente. Es un buen artículo, en el que de hecho el autor coincide en muchas de las críticas que yo mismo he vertido en este blog: bookeo improvisado y con prisas,  falta de orientación, escasa originalidad, marginar a los TNA originals en favor de fichajes de la WWE... En fin, que ofrece poco menos que lo mismo de WWE pero con  muchos menos medios y generalmente con peor plantilla (aunque a día de hoy quizá sería cuestionable, al menos a priori). O sea, más cutre.

 ¿Es que ya no se acuerda nadie de este paquete?

Lo sorprendente, para mí casi hilarante, es que en el mismo artículo se diga que todo esto comenzó con la llegada de Hulk Hogan y Eric Bischoff, literalmente hace "un año y diez meses". Tío, eso es de risa. TNA ha sido siempre muy cutre, y siempre ha hecho las mismas cosas, siempre ha tenido los mismos problemas.  ¿O es que no te acuerdas de lo aburridísima que era la dictadura de Jeff Jarrett, reflejo cochambroso del que por entonces también ejercía Triple H en la WWE? ¿Y de Monty Brown, paquetón donde los haya que TNA quiso hacernos tragar como main eventer? ¿Y de aquella debacle con Randy Savage?... Siempre ha sido así.

Aunque lo que es para mondarse es que no te acuerdes de lo sumamente mala que venía siendo TNA desde que ficharon a Vince Russo, allá por 2006, más de tres años antes de que Hulk y Bischoff aterrizasen en Orlando. Pues si no te acuerdas, te diré sólo tres palabras que condensan mucho de aquella época (y  no, no son Main Event Mafia, aunque podrían): Black Reign, Rellik. Creo que con eso basta y sobra.

Sin palabras. ¿Para qué?


En fin tío, que estaremos de acuerdo en que las eras de Russo, Bischoff y Hogan han sido terribles para TNA. Como ya dije,  no han hecho más que empeorar la situación de la empresa, acentuando sus defectos y quebrando buena parte de sus virtudes. Pero lo que no es verdad es que antes TNA fuera gran cosa,  menos aún si eliminamos a Russo de la ecuación. Eso es engañarse a sí mismo, pintar un cuadro hermoso sobre un pasado que jamás existió, como los románticos cuando pintaban lienzos de felices pastorcillos, mientras los cabreros reales se cagaban de hambre y frío. El ring de seis lados no hace al monje (afortunadamente, por otro lado).

Encima, las noticias son poco halagüeñas para los fans de TNA: la esperanza de que Hogan y Bischoff se marchen se desvanece, pues parece que han renovado con la compañía. De momento son rumores, y tampoco se sabe si mantendrían sus actuales posiciones de poder, aunque conociendo a los sujetos implicados cualquier otra cosa suena poco probable. Por otro lado, los ultimísimos rumores apuntan a que la guillotina ha segado definitivamente la cabeza de Russo. Ahora bien, simplemente le habrían defenestrado como booker principal, pero seguiría en el equipo creativo a las órdenes de... tachán tachán... Bruce Pritchard. Para quienes no lo conozcan, Bruce ha sido una personalidad importante en los bastidores de WWE durante muchos años, generalmente con fama de ser un lameculos del gran Vince. O sea, que pintan bastos amiguitos...

Este puede ser el hombre elegido para sacar adelante TNA. Échense a temblar...

CONTINUARÁ....
 

lunes, 3 de octubre de 2011

I told you so...


Adivinen quién falta en la foto...

¡MUAHAHAHA! ¡LO SABÍA!

Un breve paréntesis en mi saga sobre TNA, que como sospechaba se va a alargar más de la cuenta. Sólo para permitirme esa pedantería que tan chula queda en inglés: OS DIJE QUE ESTO PASARÍA. Os dije que Alberto Del Río recuperaría el título antes del tour mexicano, y que CM Punk iba a dejar de ser cada vez más el centro de atención. Mirad el final de Hell in a Cell: todo centrado en Triple H, en Miz y Truth, en Laurinatis y en el feud entre Vince y Trips, ese bosque que se atisba entre los árboles. El pobre CM es ya un convidado de piedra: lo han conseguido. De hecho, ya ni es el rebelde de la WWE, ahora son Miz y Truth los que salen esposados, al viejo estilo Stone Cold. Lamentable.

Lo único en lo que de momento no he acertado es en lo de Orton... pero aún tengo margen.

Una vez más, el bueno de Tito da en el clavo. La WWE tenía 3 objetivos en este 2011, y no les importa más que eso: la pelea Cena-Rock, el push a Del Río (y yo diría también Sin Cara) y el feud Trips-Mc Mahon. La súbita ascensión de CM Punk a la fama les pilló con los pantalones bajados, pero ya está todo bajo el cauce debido....

Por eso, insisto una vez más: me da igual que fuera un buen PPV, porque todo va a seguir igual. A LA MIERDA.

He aquí el verdadero centro de atención: Ahora y siempre.


sábado, 1 de octubre de 2011

TNA: El fracaso de la era Hogan-Bischoff


Hogan-Bischoff, dos hombres desesperados.

TNA ya tenía todos los problemas de los que hablaba en la entrada anterior, pero encima los ha empeorado hasta el infinito desde la llegada de Hulk Hogan y Eric Bischoff al mando de la compañía. Con el agravante de que han tirado por la borda buena parte de lo bueno que tenían, que será objeto de la siguiente entrada del blog. Desde luego, se veía venir porque ¿de verdad pretendían llegar a algo con Scott Hall, Sean Waltman, The Nasty Boys y Val Venis a comienzos del siglo XXI? (no digamos ya con Orlando Jordan). Todos los fichajes de la pareja, hasta los más deslumbrantes (Mr. Anderson, RVD, Flair, los Hardy...) han resultado un fracaso descomunal, siendo incapaces de levantar los ratings y la compra de PPV más allá de unas pocas décimas.

Lo cual demuestra una vez más que Bischoff sigue equivocado en un punto en el que lleva estancado desde mediados de los 90. Ya en aquellos años en los que Ted Turner decidió darle las riendas de la WCW Bischoff argumentaba que el problema de la empresa estaba en la ausencia de superestrellas que la gente identificara, razón por la cual se lanzó a gastar un dineral en fichar a antiguos luchadores de la WWF de los 80. Y sin embargo, ni con Hulk Hogan y Randy Savage en plantilla fue capaz de superar a la WWF, no hasta que se le ocurrió la idea de la NWO. Y pocos años después, una WWF con un roster escuálido y lleno de desconocidos y midcarders fue capaz de machacar a una WCW saturada de estrellas, con audiencias televisivas que dejaban las que había hecho la empresa de Turner durante su breve reinado a la altura de una triste teletienda. Lo cual viene a demostrar que en el wrestling lo más importante es ofrecer un producto de calidad y adecuado a la época y no la profundidad de la plantilla, aunque, claro está, esto también sea importante.

Con todo esto y mucho más, la WCW se fue al carajo. Y hay que agradecérselo a los que iban a salvar TNA...

Aplíquese lo mismo a la TNA actual. A ver, ni Hulk Hogan, ni Sting, ni Ric Flair, ni Kurt Angle, ni Mick Foley, ni los dos Hardy Boyz, ni Rob Van Dam, ni Kevin Nash, ni Scott Hall, ni Scott Steiner, ni Jeff Jarrett, ni Booker T han conseguido dar un buen empujón de popularidad a TNA. ¿Falta de estrellas? No tio, falta de calidad, pura y simplemente. Falta de capacidad para generar interés en la peña, nada más que eso. Y todavía hay gente que dice que si TNA firmase a Goldberg o al Ultimate Warrior... de verdad, es para partirse la caja.

Como bien dice el maestro Tito, según se iba haciendo más y más evidente que la era Hogan-Bischoff estaba encaminada al fracaso, la ansiedad se ha ido apoderando del booking de TNA. Se alternan ideas que se pretenden novedosas con el eterno retorno a la fórmula conocida, aunque no siempre exitosa, como a veces se pretende incluso contra toda evidencia (como la WWE devolviendo una y otra vez el campeonato a John Cena, como si con él al frente los ratings no declinaran). Por un lado promocionando a Crimson más allá de lo razonable, por otro volviendo a enfrentar a Hogan y Sting. Por una parte haciendo un más que tímido intento de recuperar la X-Division (que ellos mismos se habían cargado), por otra imponiendo un ritmo más lento a los combates, como si eso fuera a mejorarlos por sí mismos.

Vince Russo, tercera rueda del equipo que va camino de despeñar a TNA. Encima en chandal y chanclas. Así es que no se puede, no se puede...

A Hogan y Bischoff podemos añadir un tercer nombre: Vince Russo, aunque él fuese booker principal de TNA bastante antes de que ellos llegasen. Los tres están desesperados y se nota. Y lo están porque el crédito se les agota. Como es bien sabido, son los tres mosqueteros que lograron lo que parecía imposible: hundir hasta la desaparición a la empresa con el roster más profundo de la historia del wrestling, no hace falta que repita cuál es. Todos sabemos lo monstruoso que fue aquel fracaso, la cantidad de momentos vergonzosos que se produjeron y las desastrosas consecuencias que ha traído para el conjunto del mundillo. Ahora tenían una segunda oportunidad de demostrar que sus respectivos éxitos en los 90 con la WWF y la WCW no habían sido producto de la casualidad. Que su talento seguía ahí...

El resultado, como estamos viendo, está lejos de ser el apetecido. O siguiendo el argumento, el tiempo y el crédito se les ha terminado. Y eso que no eramos pocos los que sospechábamos que era el desenlace más probable. Con Bound for Glory a la vuelta de la esquina, el ya conocido anuncio de la retirada de Hulk Hogan y los constantes rumores de su marcha y la de Bischoff tras el PPV más importante de la compañía (el despido de Russo se lleva barruntando varios meses) parece que se podría abrir una nueva era en TNA, la enésima en apenas una década de historia. ¿Podría ser la buena?, ¿podría por fin dejar atrás todo el crap que nos lleva ofreciendo hace tantos años?, ¿podrá al fin presentar una competencia creíble a WWE?

No lo sé. Pero sé que ahora mismo la WWE es vulnerable y que desde luego la cosa no mejorará si no tienen otra empresa de wrestling apretándoles detrás. Así que por el bien de todos los aficionados, espero que así sea. Si Hogan, Bischoff y/o Russo siguen... bueno no creo que me arriesgue mucho si digo que TNA nunca levantará cabeza.


¿El PPV del cambio? Perdónenme si soy escéptico...

CONTINUARÁ