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domingo, 19 de febrero de 2012

Elimination Chamber

Un combate brutal en un mal momento

Bueno, pues lo voy a decir ahora, unas horas antes de que empiece el PPV: no soy nada fan de Elimination Chamber. No tanto del gimmick match como del PPV que desde 2008 secunda al Rumble en el camino a Wrestlemania. Y no me gusta por varias razones. Primera y principal, en mi opinión devalúa notablemente la victoria en el Royal Rumble. O sea, llevas casi veinte años vendiéndome que ganar el Rumble es la hostia porque así das a un luchador la oportunidad de pelear en el main event de Wrestlemania por lo máximo: el campeonato del mundo. Pero ahora, pones en medio de los dos acontecimientos un PPV en el que aparte del ganador del Rumble y los dos campeones hay otros siete luchadores que pueden optar a ganar uno de los dos grandes cinturones y llegar al gran evento en tan privilegiada posición. Es evidente que así no hay forma de que sigamos tragándonos que ganar el Rumble es una oportunidad única.

Y diréis: ¡no es lo mismo tener una oportunidad por el título en Wrestlemania que en cualquier otro PPV! Y os diré: sí, pero si sales de la Chamber como campeón, llegas como campeón a WM. Ergo, al final, es mejor ir a la Chamber que ganar el Rumble. Por no mencionar que, como ya hemos dicho por aquí, hace tiempo que quién gana el Rumble, ni va al main event de Wrestlemania, ni consigue hacerse con campeonato alguno. Mal, muy mal.

En segundo lugar, el tener Elimination Chamber en febrero retrasa el inicio del Road to Wrestlemania un mes. Antiguamente las storylines principales de cada Wrestlemania se fraguaban, como poco, a partir del Rumble. Eso daba tres meses de ángulos importantes, aunque unos se desarrollasen mejor que otros. Desde que hay PPV en febrero han ido dejando hasta después de pasado este el comienzo de muchas de las historias que deben desembocar en el evento más importante del año. Y desde que ese PPV es Elimination Chamber, más. Sinceramente, no es lo mismo tener 40 que 120 días de historias interesantes. La Wrestlemania es cada vez menos Wrestlemania, como el Rumble menos Rumble, Summerslam menos Summerslam y Survirvor Series menos Survirvor Series.

martes, 12 de julio de 2011

ODIO los handicap match...



Iba a hablar de DVD, pero estaba leyendo los resultados del RAW de anoche y me ha hervido la sangre. Sin pinchar nada, pero hay cosas que claman al cielo...

Digamos que anoche hubo no uno sino DOS handicap matches, el gimmick match que más odio. Primero, porque no es creíble que un solo tipo, por grande y duro que sea, pueda vencer a dos (¡e incluso tres!) al mismo tiempo, a menos que sea Superman. Y segundo, precisamente porque sólo sirven para vendernos como superhombres a determinados wrestlers, generalmente los main eventers, a costa de humillar y pisotear la credibilidad de otros miembros del roster. Lo peor es que no sirven para nada. No conozco a ningún fan del wrestling que le gusten este tipo de combates, y jamás, repito, JAMÁS, ha habido un sólo combate handicap mínimamente memorable*.

La WWE actual tiene una obsesión enfermiza por los handicap match, cada dos por tres hay uno. Los grandes perjudicados han sido los tag team, generalmente corderos sacrificiales de los main eventers (insisto: echad un vistazo al RAW de ayer). Luego se preguntarán los McMahon por qué los luchadores jóvenes no conectan con el público...

En fin, esto enlaza con lo que decíamos el otro día de la ineptitud de la actual WWE para manejar sus plantillas y utilizar correctamente a sus luchadores. Y no hay manera de cambiar las cosas... Por buena que sea la storyline de CM Punk (que lo está siendo), no va a suponer ninguna mejora si no hay un cambio de dirección más profundo y estructural...


También el nuevo mesías fue víctima de ridículos handicap match no hace tanto tiempo...

*: Excluyo de todo lo dicho los tag team handicap matches. Es decir, enfrentarse dos contra tres o tres contra cuatro, que sí los puedo aceptar. No así dos contra cinco, que ya es pasarse.