Westlemania preshow

Otra entrada, otra violación del copyright

¡Sí, ya lo sé, ya lo sé! Precisamente en la víspera del show más importante del mundo del wrestling os dejo con los dientes largos y freno en seco la actividad del blog. ¡Algo que podría equivaler además a una suerte de suicidio publicitario! Si no capto lectores ahora, ¿cuándo voy a hacerlo si no? Bueno, pues me disculpo de todos modos. Como ya dijese allá a comienzos del mes de febrero actualmente me encuentro pluriempleado y mi tiempo libre se ha reducido drásticamente. En las primeras semanas pude sacar tiempo para publicar un par de entradas, una de las cuales además se ha convertido en un tiempo record en la más leída en la historia del blog. Y mi compa Adolfo de Jugando Pachangas me echó una mano con una exclusiva crónica de un house show desde la ciudad en la que reside, Buffalo. Pero desde entonces he pasado un pico de curro que me ha hecho totalmente imposible siquiera pasarme por el blog a diario. Mucho menos publicar un par de entradas que tenía pensadas para el Road to Wrestlemania, una dedicada al papel de los famosos en el wrestling y otra de la serie Mis combates favoritos, amen de hacer un seguimiento a los compases previos a la propia WM. Obviamente, todo ello deberá esperar a después del evento de eventos.

De hecho, por momentos dudé de que fuera a poder ver la Wrestlemania en vivo, como tengo por tradición desde hace muchos años. Chicos, trabajo los siete días de la semana, y cuatro de esos días me levanto a las 7 y llego a mi hogar a las 22.30. Como comprenderéis mi cuerpo no aguanta más y no puedo dedicar mis escasas horas libres a otra cosa que no sea mi mujer y vegetar todo lo que puedo. Por fortuna, la Semana Santa me libra por unos días de las clases, así que podré mantener mi rito anual de ver WM en vivo y ofrecer un poco de mi sabiduría luchística a la legión de fans del blog.

Dejando ya a un lado el lloriqueo y entrando en harina, he de decir que una vez más la WWE nos ha dado la de cal. Tras un Road to Wrestlemania que hasta Elimination Chamber fue poco menos que calamitoso, han remontado un poco el vuelo. No sólo han conseguido una cartelera más que apañada, sino que además le han metido chicha a las rivalidades para subir el interés. Y no sólo a las principales, sino a prácticamente todas, salvo un poco el Bryan-Sheamus, que por ser por un título mundial debería haber tenido algo más de peso (y sí, reconozco que me equivoqué afirmando que meterían a más gente en el combate, pero si es para bien de ambos y sobre todo de Bryan me alegro), y el Kane-Orton que se lo han sacado un poco de la manga porque ninguno de los dos tenía mucho que hacer de cara a WM. Las demás storylines, bien o muy bien.

Punk-Jericho: cómo privarnos de un feud que podía haber sido la leche 

¿Lo malo? Lo de siempre. ¿Por qué nos ha torturado la WWE con un enero y un febrero terribles si podía habernos dado tres meses de diversión?, ¿por qué han tenido que esperar a marzo para cerrar la Wrestlemania o simplemente para prender un poco la mecha?, ¿por qué si cuándo quieren pueden no quieren casi nunca? Son cosas que no alcanzo a entender. Tienen talento, tienen pasta, tienen todos los recursos del mundo a su disposición, ¿por qué no hacen siempre las cosas bien? Es que no me entra en la cabeza. ¿Por qué han esperado a tres semanas antes de la WM para hacer que la rivalidad entre Punk y Jericho alcanzase el nivel que realmente podíamos esperar de dos luchadores de su calibre? No entiendo por qué nos han privado de dos meses de épica, promos incendiarias y tensión in crescendo, cuando estos dos gigantes tienen aptitudes más que sobradas para habernos dado un feud memorable. Que alguien me lo explique por favor.

Pero vamos, que ellos sabrán. Si tanto les importan los números, entonces deberían estar acojonados. Porque siempre en la "temporada grande" de wrestling (la que va de Royal Rumble a Wrestlemania), la WWE crece mucho en ratings, ventas de PPV y demás, en especial cuando la Superbowl da por finalizado el año en el fútbol americano. Este año no. El RAW antes de Wrestlemania ha hecho un patético 3.0. de rating, y eso es para preocuparse, porque significa que tras el evento de eventos tenderá a seguir bajando. Ni siquiera The Rock, Jericho, HHH, Shawn Michaels o el Taker han conseguido revertir el "efecto caída" en los números generales de la empresa. O sea, que o empiezan a tomarse en serio la necesidad de darle un vuelco profundo al producto, o mucho me temo que estamos ante una crisis sistémica del wrestling como negocio, algo que he insinuado ya varias veces antes.

En fin, que por muy buena que llegara a ser esta Wrestlemania, y mimbres para serlo tiene, los McMahon deben sentarse a reflexionar si no quieren acabar perdiendo ese imperio que tanto les ha costado construir. No serían los primeros ni serían los últimos en ser los protas de una peli no rodada de Scorsese.

Los abuelos, como siempre, dando lecciones.

En fin, creo que va a ser una muy buena Wrestlemania, aunque con la WWE nunca se sabe. Mi duda es el tiempo que le den a cada combate, porque con cuatro combates de enjundia en el cartel ajustar la duración del PPV va a ser difícil. Supongo que el de las divas y el de los General Managers serán más bien cortos, los dos midcard (el Orton-Kane y el Rhodes-Show) no llegarán a diez minutos y los cuatro de solera pasarán todos de quince. A poco que se pongan, debería entrar entre las diez mejores Wrestlemanias. Esperemos que así sea.

Y hablando de las mejores WM, leo un artículo en Solowrestling.com que me deja un poco patidifuso... Se trata de un repaso a las que según el autor y "otros colaboradores de la web" serían las WM más destacadas. La lista me ha resultado, como poco, sorprendente, tanto por las que incluye como por las que deja fuera. Entre las destacadas menciona algunas bastante irregulares, como la XX y la XXI, otra que sin discusión NO es de las mejores (la XXV) y otra cuya inclusión sería debatible, aunque no disparatada (la VII). En cambio, algunas de las más unánimemente aclamadas (la X, la XIV, la XXIV, etc.) se quedan fuera. No sé, para gustos colores, pero me parece una lista un poco... digamos que particular.  

En mi humilde opinión, la jerarquía de las WM sería más o menos como sigue. La aristocracia, las que han construido la leyenda, serían la III, VI, X, XIV, X-7, XIX y XXIV (en orden cronológico). La alta burguesía, las que merecen mucho la pena, IV, V, VII, VIII, XXII y XXVI. Clase media, aquellas que son un tanto irregulares pero no estuvieron mal: X-8, XX, XXI, XXIII, XXVII. Luego están las que sólo merecen la pena por uno o dos combates: XII, 13, 2000, XXV. Las realmente malas, que limitaría a la IX, XI y XV. Finalmente, las dos primeras están un poco superadas por el tiempo, pero siguen siendo divertidas de ver para fans old school. ¿Vosotros qué opináis?

     El tito Ron en sus días de gloria

Respecto al Hall of Fame, como ya sabéis una debilidad mía, una vez más se han confirmado los rumores y tendremos a Yokozuna y Ron Simmons entre los elegidos. No interpretéis mal lo que voy a decir, pero eso implica que la promoción de este año es la peor de todas las que han habido hasta ahora. Primero, son sólo seis inducidos, menos que nunca. Entre ellos un famoso, uno de los que más han aportado a la industria pero famoso al fin y al cabo, y tres que sin duda mereciendo su lugar en el panteón sagrado, lo hacen más que precipitadamente teniendo en cuenta los grandísimos nombres que aún no han entrado. Edge, Simmons y Yokozuna deberían estar todavía unos cuantos años más en la cola. Lo de Yoko me llama especialmente la atención, ¿no sería que querían que fuera The Rock quién le indujera y el grandullón les dijo no? Me huele algo así.

Pues bueno, poco más que añadir. Mi quiniela para la gran noche: Rock, Punk, Bryan, Taker, equipo de Laurinaitis, Kelly y la famosilla, Orton, Rhodes. Colgaré mi reseña del evento poco después de celebrado, así que ¡NOS LEEMOS PRONTO!